ROSER LÓPEZ ESPINOSA

Parece que todos los sistemas complejos evolucionan a partir de unas pocas reglas sencillas. Y esto es lo que hemos querido hacer; ponernos algunas reglas sencillas comunes e intentar existir juntos. Transitar estructuras que responden a la pauta de los números de la secuencia Fibonacci, buscar la sonoridad en las cuerdas, explorar el movimiento a partir de principios mecánicos recurrentes que comienzan en las manos: darnos las manos, agarrarnos, sujetarnos, anudarnos… Reglas sencillas cruciales que trazan una partitura física de interdependencias y confianza mutua; de consensos pero también de disensos, de afinación, de espirales, de equilibrio compartido y de desorden, de cuerpos que se repliega sobre sí mismos pero también de cuerpos que buscan con avidez movimientos colectivos. En definitiva, una partitura sobre el grupo, sus aristas y sus derivas.